Según Heiwa to Ai las causas relacionadas con la alimentación que pueden producir un cambio “positivo” en el estado de ánimo son las siguientes:
1. Aumento de los niveles de serotonina (ingiriendo triptófano,…)
La serotonina es un neurotransmisor que regula el apetito, la temperatura corporal, la actividad motora, las funciones perceptivas y cognitivas.
Para elaborar la melatonina es necesaria una proteína generada en la glándula pineal, encargada de la regulación del sueño. La serotonina aumenta al atardecer por lo que induce al sueño y permanece elevada hasta el amanecer cuando comienza a descender.
Otra función importante de este neurotransmisor, es actuar como el reloj interno de nuestro cuerpo, coordinando varias funciones biológicas como la temperatura corporal, la hormona del estrés, cortisol, y los ciclos del sueño.
La inhibición de serotonina está relacionada con los síntomas de depresión.
Los hombres producen hasta un 50% más de serotonina que las mujeres, por lo tanto, éstas son más sensibles a los cambios en los niveles de serotonina.
El aumento de serotonina produce una sensación de bienestar, relajación, mayor autoestima y concentración.
Para aumentar la producción de serotonina podemos aumentar la ingesta de triptófano, de ácido fólico, hacer relajación, ejercicio físico con regularidad, vivir al aire libre, pasear, bailar, sonreír, hacer cosas que nos entusiasmen,…
Las prácticas que impliquen relajación (meditación, yoga, Tai Chi,…) ayudan a elevar los niveles de serotonina.
El triptófano es un aminoácido que estimula la liberación de serotonina. Son alimentos ricos en triptófano: el plátano, las nueces, el yogur, el chocolate, las pastas, los cereales, el arroz, la leche, los huevos, la soja, el queso, las leguminosas,…
La falta de ácido fólico implica bajos niveles de serotonina. Son alimentos ricos en ácido fólico: los vegetales de hoja verde (espinacas, acelgas, lechugas romanas,…), las lentejas, los frijoles,…
2. Aumento de la ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos omega 3
Los ácidos grasos omega 3 nutren las neuronas, potencian la plasticidad cerebral, mejoran la memoria y facilitan el proceso de aprendizaje. Además se han asociado a mejora del estado cerebral y a menores tasas de depresión.
Son alimentos ricos en ácidos grasos omega 3: el aceite de linaza, los pescados (sardinas, salmones, atún, merluza,…), el pan de soja y linaza, las nueces, las judías de soja, los huevos, los kiwis,…
3. Buena nutrición del cerebro
Aunque el cerebro solo representa entre el 2 y el 3% del peso corporal, consume la energía del 20% de los alimentos que ingerimos.
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Extracto del libro "EL ARTE DE SANAR Reiki Heiwa to Ai®" (Volumen V)
