Reiki está reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1995 como Terapia Energética Complementaria. Desde ese mismo año Reiki está integrado en hospitales de Estados Unidos, ofreciéndose en el 60% de los hospitales. Hay más de 100 hospitales en EEUU que ofrecen Reiki a sus pacientes.
La señorita Amor, Miss Ai
La introducción de terapias naturales en los hospitales para mejorar el estado de salud de los pacientes es, como vemos, una corriente internacional y el uso de Reiki en hospitales es un hecho real en varios países. Su bajo coste, flexibilidad y variedad de aplicaciones lo convierte en una ayuda ideal para mejorar la vida de los pacientes y facilitar el trabajo de médicos/as y enfermeros/as.
Reiki también forma parte de la asistencia del sistema de salud público en países como Alemania, Suiza (en este país hay seguros médicos que reembolsan tratamientos de Reiki), Reino Unido, Japón, Holanda y Países Nórdicos. En Inglaterra Reiki está incluido en el Sistema de la Seguridad Social e incluso se ha creado un comité para explorar la posibilidad de establecer una organización nacional para la educación, formación y seguimiento del Reiki en ámbito público.
En España el Reiki llegó más tarde, aunque sus beneficios ya se ponen en práctica en varios hospitales de Madrid y Barcelona. Concretamente en los hospitales Ramón y Cajal, Gregorio Marañón y 12 de Octubre de Madrid; Hospital de Mataró y Hospital Materno Infantil Vall d'Hebron de Barcelona y en los hospitales Universitarios Virgen Macarena y Virgen del Rocío de Sevilla. Allí cada día son más los pacientes que reciben Reiki y se benefician de sus propiedades sanadoras, tanto a nivel mental, físico y emocional. Se emplea especialmente en casos de cáncer, con el objetivo de reducir el efecto de la quimioterapia y de otros fármacos, relajar al paciente y aumentar su bienestar durante la convalecencia.
En España también nos vamos acercando al modelo estadounidense en cuanto al reconocimiento y formación de Reiki en las Universidades. En la Universidad Pública Rey Juan Carlos de Madrid, figura en el Programa Oficial de Postgrado del Máster Oficial en Patología Neurológica: Actuaciones en Fisioterapia y Terapia Ocupacional, dentro del Bloque Temático: I.- Terapias Alternativas: Tema 4. El Reiki.
¿Cómo ayuda el Reiki? El Reiki consiste en la canalización de la energía por parte del terapeuta que con las manos la trasmite a los centros energéticos del paciente con la finalidad de equilibrar y armonizar su energía Ki (energía vital). Este proceso desbloquea el organismo, dotándolo de armonía y de grandes beneficios a nivel integral. Reiki actúa en el ámbito causal, llegando a la causa que provoca el desajuste en nuestro ser. Por ejemplo, si tenemos un paciente que sufre de gastritis, y por más medicamentos que ingiere continúa con ardores o dolores, el “problema” no reside en una disfunción física de su estómago, sino en un conflicto emocional. Mientras este paciente no equilibre su estado emocional o mental, seguirá teniendo dolores o acidez estomacal. Reiki ayudará al paciente a darse cuenta de la causa que le está produciendo ese malestar y proporcionará el empuje necesario para que se produzca un cambio de actitud en la persona.
El Reiki ayuda en cualquier ámbito pues es ENERGIA, componente esencial de todo. Desbloquea aquellas zonas que están obstruidas por malos pensamientos o sensaciones negativas (miedos, tristezas, angustias, rabia) y así comenzamos a funcionar equilibradamente restaurando el bienestar físico, mental y emocional.
Entre sus ventajas generales y particularmente en su empleo en hospitales destaca, el hecho de que no interfiere en diagnósticos ni tratamientos, no sugiere cambios en las medicaciones, no tiene contraindicaciones, reduce los efectos secundarios de la radioterapia y quimioterapia, y potencia la reacción curativa de los fármacos. Acelera la recuperación post-quirúrgica, mejora la actitud mental y reduce los efectos negativos de los medicamentos y de otros procedimientos médicos. Además, reduce la ansiedad, la tensión muscular y el dolor. Proporciona bienestar y aumenta el estado de salud integral.